Ante la pandemia de covid-19, la Organización Mundial de la Salud (oms) recomendó el distanciamiento social como una medida para desacelerar la velocidad de propagación del virus sars-cov-2. Esta medida tuvo como una de sus consecuencias el cierre de centros de educación y el incremento significativo de trabajo a distancia (cepal, 2020c). El confinamiento en los hogares puede estar generando en el ámbito de la intimidad situaciones de tensión, de negociación y de conflicto, que, asociadas a la incertidumbre, producto de la pandemia, requieren ser identificadas y analizadas para generar conocimiento pertinente y en tiempo, ante una problemática inédita que rebasa el campo de la salud y confronta la vida cotidiana de nuestras poblaciones.
Ante este panorama, se aplicó una encuesta virtual en la primera semana de mayo de 2020 por medio de Google Forms en el Área Metropolitana de Guadalajara (amg) y en la Zona Metropolitana de Colima (zmc) con el objetivo de conocer cómo se han trastocado, en el ámbito de la intimidad, las dimensiones de la conyugalidad, los papeles de género y el cuidado mutuo en parejas heterosexuales durante el confinamiento causado por la pandemia por covid-19. La investigación nos permite concluir que la intimidad en las parejas heterosexuales encuestadas evidencia que los casados y quienes tuvieron relaciones de más de 10 años de convivencia vivieron conflictos pero no consideraron el divorcio o la separación como una salida, como sí lo consideraron en una mayor proporción los solteros, y los solteros que no cohabitaron –en particular los de la zmc– fueron los más afectados por el confinamiento y tuvieron arreglos más tradicionales que ese mismo grupo del amg, y que tanto hombres como mujeres consideraron que la comunicación con la pareja, el tener intereses y objetivos comunes, y el desamor fueron elementos claves que afectaron la intimidad conyugal. Por otra parte, los hallazgos muestran que los papeles de género continúan siendo en ambas ciudades una de las esferas de la vida privada y pública de la que se echa mano en situaciones emergentes y acuciantes como la derivada por la pandemia, situaciones que son imposibles de eludir y que tienen un impacto directo en las condiciones de igualdad entre mujeres y hombres. Finalmente, sobre el cuidado mutuo en la pareja, destaca, por un lado, la reproducción de cuidados materiales/económicos por parte del varón y, por otra, una feminización de los cuidados emocionales y de atención a la salud por parte de las mujeres. Sin embargo, en las parejas jóvenes se detectan tendencias interesantes hacia un mayor involucramiento tanto de las mujeres como de los hombres en las tareas de cuidado emocional y de la salud en tiempos de confinamiento.