Editorial vol. 8, núm. 15

Con este número, Encartes cumple siete años en los que ha ido acumulando logros. Este 2025, la revista fue evaluada e indizada por Scielo México. Con el paso del tiempo hemos buscado lograr un equilibrio entre la publicación de una ciencia de calidad, y a la vez desafiar los tiempos de producción para publicar temas de actualidad. La revista Encartes se ha esforzado para que las investigaciones en el terreno de las humanidades aporten ideas, debates e información precisa a cuestiones y problemáticas que conforman el acontecer, es decir, el presente. Estamos muy contentos porque creemos que este número lo logra cabalmente.

El dosier que conforma la sección de Temáticas está dedicado a un asunto de mucha actualidad: la migración hacia Estados Unidos, que, por un lado, se ve amenazada por las políticas de Donald Trump –el nuevo presidente de ese país–, quien pretende endurecer la política migratoria; y, por el otro, por el crimen organizado, pues las rutas que llevan del sur al norte son territorio de violencias y extorsiones inimaginables que los migrantes deben enfrentar. Su estudio convierte este tema en objeto álgido y difícil. Es, como definió Pierre Bourdieu a la Sociología: un deporte de combate. El dosier trata sobre experiencias migratorias que tienen lugar a lo largo de una ruta que parte del Darién (Panamá y Colombia) a Tapachula (Chiapas). Cuando le comenté a un colega el tema que trataríamos, con cierta incredulidad me dijo: “¿Pero cómo hicieron investigación en el Darién si es una zona impenetrable?”. Ese es el mayor mérito de este dosier, ya que pone a prueba una novedosa metodología que pudiéramos llamar “etnografía en ruta”, que incluye puntos de arranque y lugares de atorón, así como lugares de destino (al que quizá nunca lleguen).

En conjunto, los artículos muestran que, debido a que los procesos de migración cada vez son más inestables y riesgosos, los trayectos se vuelven más largos y difíciles de sortear; pero a la vez esta realidad crea nuevas fronteras de pasaje, nuevos puntos de retorno y nuevos sitios de estancamiento forzado denominados como “estancias migratorias”. Estudiar la migración exige una atención multisituada y ello solo se logra sumando esfuerzos colectivos de investigación, como se presenta en este número y que no se lograría con un trabajo solitario. Además, este enfoque desafía nuestras maneras de pensar las geografías, las distancias, los cambios de identidad y los recursos que los migrantes tienen que habilitar para superar los múltiples obstáculos a los que se enfrentan durante su odisea. El primer artículo corresponde al texto de Jessica Nájera: “Venezolanos en Costa Rica: entre el tránsito y el establecimiento. La Etnoencuesta de inmigración reciente como aporte metodológico para el estudio de la migración en países de llegada”; Nájera recurre a la etnoencuesta de inmigración reciente lamp enir para brindar información sobre las condiciones de vida e historia migratoria, laboral y social de personas que llegan a un país y presentar las estrategias que los migrantes tienen que implementar. Alberto Hernández, Carlos S. Ibarra y Arturo Fabián J. nos conducen al tema del riesgo que existe en la ruta que va del Tapón del Darién hasta México, debido principalmente al control que el crimen organizado tiene sobre la ruta, a la vez muestran cómo las redes sociodigitales se han convertido en un recurso para conformar comunidades digitales de apoyo para enfrentar los peligros. Por su parte, Abdel Camargo e Iván Porraz son los autores de “Etnografía de la ruta migrante, los ‘caminantes’ de la carretera costera de Chiapas, México”, destacan la fenomenología de los “caminantes”, que se ven asediados por las agencias policiales y de regulación migratoria y que, a la vez, construyen una novedosa economía migratoria.

En “Devociones en tránsito: una aproximación etnográfica al circuito migratorio Soconusco Costa-Istmo”, Mónica Marín se sitúa en la región fronteriza del sur de México y Centroamérica por la que desfilan migrantes de América Central, América del Sur e incluso provenientes de Asia y África. Su artículo atiende cómo la religión se ha convertido en un recurso simbólico que dota de esperanzas y permite a los migrantes construir comunidades de apoyo dentro de las propias condiciones de vulnerabilidad que viven. Este tema se ve reforzado con la contribución de Rafael Alonso Hernández, “Procesos migratorios y redes de albergues en México”, que explica cómo los albergues organizados en amplias redes generan una suma de sitios que aportan hospitalidad y solidaridad a lo largo de la ruta migratoria. Cierra el dosier el texto titulado “Del Tapón del Darién al de Tapachula. Trazo y conformación de una nueva ruta de desplazados con destino a Estados Unidos”, de América Navarro y Alberto Hernández, el cual abarca el amplio territorio de las rutas andadas por los migrantes desde que cruzan el Darién hasta que ingresan a México por Tapachula, considerada por ellos como “una ciudad prisión”, y muestra los peligros a los que se ven expuestos durante el trayecto.

En la sección de Realidades socioculturales se publicaron tres artículos: “Notas sobre conspiracionismo a propósito de Los reptilianos y otras creencias en tiempos de Covid-19. Una mirada desde los imaginarios inverosímiles en clave castoridiana”, escrito por Enriqueta Lerma, que aborda el nuevo brote de teorías conspiracionistas emanadas durante la pandemia de covid-19 que, aunque aparentemente pueden parecer inverosímiles, más bien serían fuentes de explicación de que las catástrofes se derivan de un mundo controlado y amenazado por reptilianos, iluminatis y extraterrestres; “La Fiesta de los Arcos: la renovación de la alianza entre los antiguos pueblos de indios de Lagos de Moreno”, de Héctor Medina, nos muestra el rostro indígena de Lagos de Moreno, una ciudad de la región de Los Altos de Jalisco, donde la identidad buscó destacar la blanquitud racial y cultural de su habitantes, pero en la que persisten los pueblos indígenas. No muy lejos de ahí, Adriana Guzmán, en su artículo “Xumuavikari náayarite. Los tiznados de la Semana Santa cora de Nayarit”, comparte una etnografía de las festividades de Semana Santa (o Judea náayari), en la que se articulan los símbolos católicos con las cosmovisiones de este antiguo pueblo originario reconocido como los coras, reivindicado como náayarite.

En la sección Encartes multimedia, Gustavo Morello aporta un documental sobre “El oficio (religioso) de tatuar”. Aunque algunas denominaciones cristianas ven con recelo o incluso buscan prohibir el tatuaje religioso, esta práctica tiene una larga historia y en el presente se ha convertido en una manera muy recurrida de corporizar la fe. La propuesta de Morello explora las intersecciones entre arte, espiritualidad y comercio. También se incluye un documental etnográfico de Rachel Barber: “Sobre los diferentes ritmos en la labor de una bordadora tseltal” que, al retratar la vida diaria de una mujer bordadora de los Altos de Chiapas, destaca el valor de preservación ancestral de cultura que tienen tanto el bordado como las demás actividades de su día a día. El último de esta sección, “El monocultivo y el ‘ecuaro’: aspectos y genealogías de la modernización agrícola en San Miguel Zapotitlán, México”, producido por Rubén Díaz Ramírez, también da cuenta de la persistencia de relaciones entre seres humanos, no humanos y sobrehumanos vigentes en la manera de practicar en el presente la agricultura en el ejido de San Miguel Zapotitlán.

La sección de Entrevistas integra una charla de Alina Peña con el antropólogo argentino Alejandro Grimson que trata sobre los “Desafíos intelectuales para la imaginación política”; y una entrevista que lleva por título “Aprender con las luchas: el caminar del ‘Doc Alonso’”, realizada por Inés Durand al antropólogo mexicano Jorge Alonso (el Doc) sobre su trayectoria como investigador y como incansable activista de diferentes luchas sociales.

La sección Discrepancias coloca de nuevo un tema vigente y controvertido: el conflicto entre Palestina e Israel. La moderadora encargada fue Arely Torres, quien invitó a cinco investigadores de América Latina a exponer sus ideas respecto al conflicto de Israel y Palestina y sobre las reacciones que han surgido en las universidades de distintos países de América Latina: México (Moisés Garduño, Marlene Hernández Morán); Brasil (Brenda Poveda); Chile (Nicolás Panotto) y Argentina (Damián Setton).

La sección Reseñas críticas nos invita a leer tres interesantes novedades editoriales: Rosana Guber aborda el libro coordinado por Gustavo Lins Ribeiro, Carmen Bueno Castellanos, Hilary Callan, Virginia García Acosta y Laura R. Valladares (eds.). Panorama de las antropologías mundiales; Christian Omar Grimaldo reseña el libro Ciudad Copyright de Conrado Romo, y Antonio Rivera introduce la lectura del libro de Diego Lizarazo, La fotografía y el otro. Cuerpo y estética de retorno.

Con el mismo afán de formar opinión desde el acontecer sobre problemáticas vigentes, el equipo editorial de Encartes lanzó una convocatoria al IV Concurso de fotografía sobre “Manifestaciones globales en torno al conflicto Israel-Palestina en imágenes estéticas antibélicas en distintos lugares del mundo”. La convocatoria recibió imágenes que captan objetos, sujetos, lugares, paisajes, símbolos, estéticas que acompañan las movilizaciones y manifestaciones en torno al conflicto bélico Israel-Palestina y que tienen lugar en distintas universidades, en espacios públicos, frente a las embajadas, en festividades patrias, en ceremonias políticas y religiosas e incluso en desfiles y demás celebraciones. Esta iniciativa tiene como motivación mostrar la creatividad estética en los activismos antibélicos y anticolonialistas.

Espero que sea de su interés el contenido de este número de Encartes y que disfruten de su lectura.

Renée de la Torre Directora editorial de Encartes Guadalajara, Jal., marzo de 2025